miércoles, 13 de febrero de 2013

IM SUCH A MESS!

"I'm fine, i'm just a bit of a mess"

Estoy bien, solo soy un poco desastre.

Y por eso no me va realmente bien en el instituto, porque no hago nada, y lo se, ¿A quién voy a engañar? No tengo la presión que tienen otros, o más bien la motivación. No se que voy a ser en la vida y el caso es que lo que quiero ser no parece tener futuro y bueno, por completo eso es una gran mierda. Encima no me caen bien la mitad de los profesores, pero bueno, qué le vamos a hacer, todo el mundo no nace con un diez en el expediente. Yo nací con gran capacidad de comprensión pero con una idiotez muy grande para muchas cosas.

Y porque soy un poco un desastre no soy muy buena en mi deporte, que es el volley, pero bueno la vida sigue, por suerte, igual que hay gente mejor que yo hay también gente peor que yo, y bueno, las mejores siempre tienen ganas de ayuda y yo las ganas de mejorar no las pierdo nunca y tengo para dar y regalar.  Además por suerte no tienes que ser la caña de España e ir a la selección regional para poder jugar al volley con un nivel medio-alto.

Y porque soy un poco desastre no tengo un cuerpo perfecto, y no hago nado por tenerlo, aunque debería, pero nunca encuentro el momento, y todo es una gran montaña de verme mal y quejarme por algo qué sé que no voy a cambiar porque simplemente soy un desastre. Y cada vez que empiezo a comer bien soy un desastre y lo dejo.

Y porque soy un poco un desastre no se me dan bien las relaciones de pareja, porque soy un poco tonta, o muy niña, o muy madura, o me vuelvo perezosa, o me pillo más de lo que debo o menos o hago mucho el tonto o yo que sé. Y... por eso sigo teniendo un amor platónico como las quinceañeras, solo que el mío no canta en la tele.

Gracias a Dios el mundo sigue girando, y prometo que algún día solucionaré alguno de esas cuatro idioteces que me pasan, pero de momento no. Que ahora lo que necesito es que la música suene más alta que los problemas.

Callate, zorra

Hoy brindo por todas esas personas a las cuales alguien ha dicho que nos importan, pero no. Hablo de la gente que llora por todo y hace que el mundo lo sepa. Sinceramente, niñata, porque llamarte otra cosa sería mentir, todos tenemos problemas, sí, y probablemente muchísimo peores que los tuyos, y, ¿Qué hacemos? cogemos nuestra vida y hacemos algo con ella, lo superamos. Si nos caemos, nos levantamos, así es la vida. 

En primer lugar, no me importan en absoluto tus problemas, pero nada, me da igual si estas con uno o con otro, ni yo ni la mitad de la gente quiere saber a qué gilipollas que acabas de conocer te metes en la cama, no es mi problema, no me interesa, así que deja de gritarlo por las esquinas mendigando ser el centro de atención.  No me interesas, por mí como si vas y vendes tú trasero en la esquina. Al igual que no me interesa si el chico que te gusta no te presta atención porque eres una guarra y él lo sabe. De verdad, por tu bien, no hables a gritos, no solo quedas como una maleducada y una cateta sino que encima no le interesas a nadie. ¿Qué te crees que va a pasar? Vamos a ignorar tu culo, por zorra. 

En segundo lugar, vas de guay y no lo eres. En serio, eres una petarda, no te aguantan ni tus amigas, que por otro lado son un atajo de falsas, pero bueno, es que para soportarte a ti necesitan sus dos caras.

Para terminar, aunque te creas guay del paraguay por lloriquear cuando todos estamos enfrente, eso solo te deja como lo que eres, una niñata sin personalidad con ambición por destacar y que lo hace como sea, pero como eres una patética, tienes que llorar. Y si de verdad estás mal, a nadie le importa, haz como todos, recoge tu mierda, llora en tu casa, sécate las lágrimas y sonríe, porque con lo falsa que eres, por muy mal que estés, no creo que te cueste.

lunes, 11 de febrero de 2013

Lost

Y cuando te pierdes, ¿Qué se supone que se debe hacer? En el colegio te enseñan como sentarte bien, a escribir, a leer. Te enseñan sobre plano un millón de sueños que vuelan por el mundo, lugares mágicos, épocas a las que nunca podremos volver. Te hacen entender lo que pensaban un grupo de personas, su filosofía de vida. Hacen que sepas resolver sobre papel problemas que probablemente nunca tengas que resolver en la vida real, te enseñan sobre economía, sobre palabras vacías, como estructurar frases para que tengan un sentido lógico. Y después de todo eso, nada. Nadie te enseña a salir vivo de una situación asfixiante, nadie te dice lo que debes hacer cuando no te queda nada por lo que sonreír.

Nadie te enseña como reaccionar ante ciertas situaciones, qué decir, como comportarte. Nadie te dice qué debes hacer con un corazón hecho pedazos, o con una vida abocada al fracaso, sin metas ni propósitos. Bueno, sí, sí que lo dicen, hablan, charlotean y pretenden saber lo que balbucean pero en ese aspecto nadie coincide, no hay normas, no hay formas de saber qué es lo correcto.

Y sin embargo son esas cosas las qué más daño hacen al corazón.

sábado, 9 de febrero de 2013

Atelofobia

"Atelofobia. Miedo atroz a la imperfección de cualquier tipo."

 Normalmente asociada con la presión ejercida por la sociedad y sus ansiosas ganas de que todo el mundo sea perfecto. Si no eres extremamente guapa, no eres perfecta. Si no tienes la talla cero, no eres perfecta. Si no coges una carrera de ciencias, no eres perfecta. Si no llevas la ropa que todos llevan, no eres  perfecta. Si no haces lo que te dicen, no  eres perfecta. Si no tienes ningún talento oculto que lleves practicando toda la vida no eres  perfecta. Si no haces lo que todos hacen, eres perfecta. Si no hablas como ellos, no eres perfecta. Si hablas demasiado, no eres perfecta. Si no hablas mucho, no eres perfecta. Si has tenido muchas relaciones no eres perfecta, y si has tenido muy pocas, tampoco eres perfecta. Si tienes el mínimo defecto, por pequeño o imperceptible que sea, dejas de ser perfecta.

La atelofobia produce una gran angustia a quien la padece, junto con la sensación de fracaso y de desperdicio de la vida.

Gracias sociedad, esto es lo que nos enseñáis.

Lifeless

¿Alguna vez has perdido por completo las ganas de seguir existiendo? Como si nada te llenase lo suficiente, como si vivieses la vida como una mera espectadora más que como la protagonista de la película. Superando cada día como otro cualquiera, sin ninguna ilusión que te saque una sonrisa. Haciendo el tonto, intentando darle sentido a la vida, sin pensar demasiado, viviendo rápido, porque cuando vas lento, el dolor se hace más notable.

Sin pensar, fines de semana bebiendo hasta el mareo, hasta que ya no se puede pensar, hacer gilipolleces de las que te arrepientes, abandonarte pensando que te estás encontrando, cambiar por gente que no se lo merece, sin ninguna esperanza de que te lo vayan a agradecer. Perder el tiempo pensando en la vida, sin destino ninguno, como si el mundo se fuese a parar porque a ti no te apetece seguir así. Pero nunca se para, y esa es la pena, has parado pero la vida sigue adelante, no se para para nadie.

Y entonces ese estilo de vida se convierte en costumbre. 

domingo, 30 de diciembre de 2012

Broken

Eramos perfectos, ¿Recuerdas? Volábamos como cometas. Eramos felices, sonreíamos entre beso y beso y discutíamos entre bromas y palabras bonitas. 

Y entonces un día acaba. Y en el momento no pasa nada, sonrisas, ¿Amigos? Por supuesto, guardemos las formas, sonriamos y finjamos que todo está bien. Pero un día te despiertas y te das cuenta. Te das cuenta de que has estado mal todo este tiempo, de que en ese momento sonreíste y dijiste que podrías con todo, te has hecho la fuerte. Todo este tiempo has caminado con la cabeza bien alta y te has sentido bien contigo misma mientras que todo era ruido y que tu vida era rápida y superficial. Pero entonces, algo cambió, la vida empezó a ir más despacio y todos los sentimientos que guardabas quisieron explotar como una bomba de relojería.

Y te sientes rota. Como si el corazón se rompiera en diez mil pedazos. Y un nudo se forma en la garganta, y cuando escuchas su nombre te sientes tan vacía que te duele el corazón. Te duele de verdad. Ese dolor se vuelve insoportable, impensable. El malestar te invade. Lo evitas pero siempre llega el momento, en el que todo va más despacio y te da tiempo a pensar. Te da miedo parar porque sabes que volverá, volverán los recuerdos. Cada sonrisa, cada beso, y con ellos el vacío.

Y claro que te lo dicen, no vale la pena, te mereces algo mejor. Pero eso se desliza vaporoso por encima del dolor, no sirve absolutamente para nada. Sé feliz, te lo mereces. ¿Y si la persona que te hace llorar es la única que te puede hacer sonreír? ¿Entonces quién es feliz?




sábado, 27 de octubre de 2012

Love & Other Drugs

No, no digo que el amor no exista por supuesto que existe, quiero decir que por amor se han echo cosas preciosas, pero cuando el amor se acaba, si se llega a acabar, el vacío que deja es muchísimo más inmenso de lo que se siente antes de que llegase. No quiero decir que eso me importe, porque seguramente me volvería a equivocar, porque eso está claro, no te das cuenta de que te estás enamorado hasta que estás hasta los huesos, y  da igual lo duro que creas que eres, porque no hay corazón al que no pueda llegar el amor. 

A tres metros sobre el cielo, en el paraíso, allí, tan alto, sonriendo sin parar, dónde viven los enamorados. Creo que lo llaman así porque cuando ya no le estás te das el golpe de tu vida. Sí, estar tan alto solo te lleva a que el golpe sea mayor, y lo peor, es que mientras estás elevándote en el aire, eso, no te importa lo más mínimo, porque te hace sentir bien. Cuanto más alto vuelas, más quieres subir, es como una droga, te hace sentir que flotas, pero cuando se acaba, cuando llega el día de después, te rompe en mil pedazos, te destroza por dentro. Y entonces, llega otra persona, y da igual lo duro que te pongas, lo poco que abras tu corazón a los demás, porque siempre, siempre, llegará alguien que te derrita, y entonces, no habrá vuelta atrás, en cuestión de segundos te encontrarás volando otra vez, sabiendo que tarde o temprano volverás a caer, pero disfrutando cada minuto, enamorándote cada día más.